Crónica del Viernes de Dolores 2025 en Sevilla: los barrios abren con plenitud la Semana Santa

por | Abr 12, 2025 | Blog, Galeria, Noticias | 0 Comentarios

Sábado, 12 de abril de 2025 | Sevilla

El Viernes de Dolores ha vuelto a convertirse en el umbral ferviente que da paso a una nueva Semana Santa en Sevilla. La jornada ha transcurrido sin incidencias meteorológicas a pesar de las previsiones inciertas de días anteriores. Finalmente, la mejoría del tiempo ha permitido que las siete hermandades previstas pudieran realizar sus respectivos recorridos por los barrios sevillanos, iniciando con intensidad y sin contratiempos los primeros cortejos penitenciales del año.

Un estreno histórico en el Polígono Sur

Uno de los momentos más destacados del día ha tenido lugar en el Polígono Sur. La Hermandad de Bendición y Esperanza ha realizado por primera vez estación de penitencia como corporación reconocida canónicamente, siendo esta su primera salida oficial como hermandad tras el respaldo del Arzobispado y el Consejo de Hermandades. Desde la parroquia de Jesús Obrero, sus nazarenos han recorrido las calles de una de las zonas más necesitadas de la ciudad, llenando de fe y esperanza su entorno, con una devoción popular que ha desbordado los márgenes del barrio.

Cambios en los recorridos y nuevas estampas

En Pino Montano, la cofradía ha adaptado su itinerario debido a las obras de la nueva línea del metro. Aun así, el cortejo ha fluido con solvencia y ha mantenido su tradicional paso por el Parque de Bomberos, donde la Virgen del Amor recibió una emotiva petalá desde lo alto de una escala. Como novedad, Fernando Martín Alés se ha estrenado como capataz del paso de palio, imprimiendo su sello en una jornada en la que también se conmemora el 25 aniversario de la hechura de la dolorosa.

También se han producido modificaciones en Bellavista, donde la Hermandad del Dulce Nombre ha adelantado en media hora tanto su salida como su entrada, además de alterar su itinerario para evitar las calles Roque Barcia y Violeta. La Virgen del Dulce Nombre, obra de Luis Álvarez Duarte, ha vuelto a emocionar al público que se ha congregado en cada esquina del populoso barrio.

En Heliópolis, la Hermandad de la Misión ha discurrido un año más entre los naranjos en flor y la luz de las avenidas anchas del sur de Sevilla. Su visita al Hospital Virgen del Rocío ha vuelto a ser uno de los momentos más sentidos de la noche. En esta edición, el recorrido ha incluido la calle Periodista Ramón Resa para tomar después Páez de Rivera y acceder directamente a la Avenida de la Palmera, aportando un aire renovado al discurrir del cortejo. La presencia juvenil, nutrida por el alumnado del Colegio Claret, ha vuelto a ser una nota distintiva de esta corporación.

Silencio en Triana y sobriedad en el Sagrario

La Hermandad de Pasión y Muerte ha llenado de recogimiento las calles de Triana con su habitual carácter austero. Con su paso por enclaves como Pagés del Corro o la parroquia de Santa Ana, la cofradía ha vuelto a ofrecer una de las estampas más singulares de la jornada. En el centro de la ciudad, el Cristo de la Corona ha realizado su estación de penitencia desde la parroquia del Sagrario, cruzando la Plaza Virgen de los Reyes para adentrarse en el corazón de la Sevilla más monumental.

Paz y Misericordia

La Agrupación Parroquial de Paz y Misericordia, con sede en la parroquia de San Luis y San Fernando, inició su salida desde el barrio de Rochelambert a las 18:00 horas, prolongando su recorrido hasta la medianoche. En esta ocasión, como viene siendo habitual en los últimos años, la corporación llevó su mensaje de fe hasta una parroquia cercana, deteniéndose en la de Nuestra Señora del Carmen, en el barrio de La Plata.

La comitiva estuvo presidida por el Cristo de la Paz, obra de Juan Manuel Miñarro bendecida en 1985, acompañado por la Virgen de la Misericordia, dolorosa adquirida a Luis Álvarez Duarte en el año 2000. Desde que ambas imágenes comenzaron a procesionar juntas en 2010, se ha consolidado una de las corporaciones más jóvenes pero con una fuerte raíz devocional en su barrio. El cortejo recorrió calles como Calatayud, José Sarabia o la Avenida de los Gavilanes, dejando estampas de recogimiento y solemnidad en un recorrido que sigue creciendo en participación y acogida popular.

La ciudad que empieza a latir

Este Viernes de Dolores, la ciudad ha comenzado a latir a compás de tambor y cruz alzada. Siete cofradías han protagonizado una jornada marcada por la ausencia de lluvia, la afluencia masiva de fieles y la presencia de barrios que, año tras año, siguen consolidándose como pilares imprescindibles de la devoción popular sevillana. Desde el Polígono Sur a Bellavista, desde Pino Montano a Triana, Sevilla ha vuelto a demostrar que la fe no entiende de centros ni periferias, sino de corazones que se entregan cada primavera.

Con este inicio pleno y esperanzador, la ciudad se prepara para afrontar una nueva Semana Santa que ya se adivina intensa y cargada de emoción.

Fotografías de Eva García, David Camacho, Rafa Soldado, Rubén García y Elías Beltrán.