El pasado domingo 8 de septiembre de 2024, la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores del Cerro del Águila dio inicio, como cada año, a los cultos en honor a su titular con el tradicional Rosario de la Aurora. Desde 1980, este acto se ha consolidado como una de las más profundas manifestaciones de fe de la feligresía, celebrándose cada segundo domingo de septiembre y reuniendo a numerosos devotos en torno a la Sagrada Imagen de la Virgen de los Dolores.
A las 7:00 horas, las puertas del templo se abrieron para dar paso al cortejo, que recorrió las calles del barrio con el recogimiento que caracteriza a este culto externo. La Virgen fue acompañada por un cortejo solemne, encabezado por la cruz parroquial, flanqueada por ciriales, y seguido por hermanos con cirios, el pertiguero con el Libro de Reglas, los estandartes de la Hermandad del Rocío y de la propia Hermandad del Cerro, la Junta de Gobierno y el cortejo litúrgico.
El itinerario llevó a la Virgen por Párroco Antonio Gómez Villalobos, Álvarez Benavides y Lisboa, entre otras calles del barrio, mientras el rezo de los misterios del Santo Rosario resonaba en las voces de los presentes, acompañadas por el Coro de Campanilleros Santo Domingo de Bormujos. A lo largo del recorrido, el fervor y la devoción de los fieles se manifestaban en cada esquina, con vecinos que salían a recibir a la Virgen y acompañarla en su paso.
Siguiendo la hermosa tradición de esta Hermandad, las andas de la Virgen fueron portadas durante todo el trayecto por hermanas y devotas de Nuestra Señora de los Dolores, un gesto que subrayó aún más la participación activa de la comunidad en este acto de fe. El recorrido, que incluyó calles como Maestro Falla, Tomas Pérez, Teruel, Lérida y Francisco Carrera Iglesias, concluyó en el templo en torno a las 10:00 horas, momento en el que se dio paso a la Santa Misa, presidida por el Rvdo. D. Francisco Javier Brazo Delgado, párroco de Nuestra Señora de los Dolores y director espiritual de la Hermandad.
Este Rosario de la Aurora, como cada año, no solo sirvió para honrar a la Santísima Virgen de los Dolores, sino también para fortalecer los lazos de devoción y comunidad en el barrio del Cerro del Águila, manteniendo viva una tradición que sigue emocionando a los cofrades y fieles que participan en ella.
A continuación ofrecemos una galería de imágenes de nuestro fotógrafo David Camacho y Álvaro Ojeda.
