El pasado sábado, 1 de junio, a partir de las 18:30 horas, la imagen de San Juan Bosco y María Auxiliadora de la Trinidad recorrieron las calles de Sevilla en una solemne procesión. Este evento marcó el cierre de los cultos dedicados a una de las más grandes devociones marianas.
La procesión comenzó en la Basílica de María Auxiliadora, ubicada en el centro salesiano, uno de los epicentros de la devoción a esta advocación. La imagen de María Auxiliadora, que fue realizada por el taller de Sarriá y bendecida en 1895, inició su recorrido por las calles del colegio mayor, los Terceros, Santa Catalina, San Pedro, Santa Ángela de la Cruz, Espíritu Santo, San Román, y la casa natal de Santa Ángela de la Cruz.
A lo largo de seis horas, la Virgen de Don Bosco siguió un itinerario que incluyó las calles Basílica, María Auxiliadora, Salesianos, Arroyo, Joaquín Morales y Torres, Mateos, Verónica, Sol, Plaza de los Terceros, Capataz Manuel Santiago, Alhóndiga, Almirante Apodaca, Plaza de San Pedro, Santa Ángela de la Cruz, Dueñas, Doña María Coronel, Peñuelas, Plaza de San Román, Sol, Madre Isabel de la Trinidad, María Auxiliadora y Basílica, regresando a su punto de partida a las 0:30 horas.
La Archicofradía de María Auxiliadora Coronada, con sede en esta histórica basílica del siglo XVII, decidió fomentar la devoción alternando dos recorridos diferentes cada año. Este año, María Auxiliadora cruzó de nuevo por la calle Sol, destacada en esta procesión.
María Auxiliadora es una de las imágenes coronadas más antiguas. Fue coronada canónicamente en 1954 por el cardenal Pedro Segura, convirtiéndose en la tercera imagen en recibir esta distinción tras la Virgen de los Reyes y la Virgen de la Antigua, siendo además la primera imagen coronada al aire libre en la Plaza de Calvo Sotelo, actual Puerta Jerez.
A continuación ofrecemos una galería de imágenes de nuestro fotógrafo Elías Beltrán.
